contemporary woman _ Jane´s Walk Pamplona: urbanismo con perspectiva de género de la mano de URBANAS
El colectivo URBANAS y personas participantes del primer paseo de Jane en Pamplona que se realizó por el barrio de la Milagrosa el 5 de Mayo de 2018. Foto: Belén Pomés
EL COLECTIVO URBANAS (formado por arquitectas, urbanistas, biólogas, economistas, sociólogas y psicólogas) se creó en 1999 en Navarra para fomentar la participación de las mujeres en el planeamiento urbanístico, vivienda y medioambiente y para incorporar la perspectiva de género en esos campos.
¿Pero qué es un urbanismo con perspectiva de género?. Tal y como ellas lo entienden es un urbanismo de sentido común, un urbanismo pensando en las personas que van a habitar esos espacios y teniendo en cuenta su opinión y necesidades. Ponen el foco en las mujeres pero sin olvidar otros grupos también invisibilizados como ancianos, niños, enfermos, discapacitados, inmigrantes, etc. En resumen, un urbanismo para todas las personas, centrado en la igualdad de género, la accesibilidad y la sostenibilidad.
Y para fomentar este tipo de diseño urbanístico, el pasado 5 de Mayo se realizó El PRIMER PASEO DE JANE en Pamplona (Jane´s Walk en inglés) por el barrio de la Milagrosa y guiado por el Colectivo Urbanas, conmemorando el cumpleaños de Jane Jacobs. Este paseo formó parte de una red de miles de "Paseos de Jane" que tuvieron lugar en más de 200 ciudades de todo el mundo para difundir el espíritu de Jane en su lucha por defender un urbanismo amable con las personas, frente a intereses inmobiliarios y automovilísticos.
Grupo de personas que participaron en el primer paseo de Jane en Pamplona junto al colectivo Urbanas encargadas de guiar el paseo. Foto: Colectivo Urbanas
Jane Jacobs, periodista estadounidense, fue pionera en los años 60 y 70 al hablar de que las calles en las que no había comercios eran inseguras para las mujeres (al no haber alguien vigilando); que los nuevos barrios de las afueras formados únicamente por viviendas sociales eran un fracaso porque se convertían en guetos o que las plazas y espacios abiertos eran fundamentales para la vida del vecindario. Luchó para que las personas y las aceras fueran las protagonistas de los barrios frente a los coches y carreteras, consiguiendo paralizar varias intervenciones urbanísticas sobre todo en la ciudad de Nueva York.
Durante el paseo por el barrio de la Milagrosa de Pamplona fuimos observando y escuchando atentamente a las explicaciones de Urbanas para comprobar si su diseño urbanístico realmente estaba pensado para las personas que lo utilizaban y si propiciaba la vida en sus calles.
A la izquierda de la foto, una integrante del colectivo Urbanas durante una de las explicaciones del paseo. Foto: Ana Blanco
Como ejemplo de lo que fueron las explicaciones durante el paseo, os expongo en detalle la que tuvo lugar en la plaza Felisa Munárriz, una plaza de grandes dimensiones que fue creada junto a los nuevos edificios de viviendas que la rodean hace aproximadamente una década.
PLAZA FELISA MUNÁRRIZ
¿Quién es Felisa Munárriz?. Ninguna de las personas que asistimos al paseo supimos responder, y es que muy poca gente en Pamplona sabe quién fue. Por eso, llama mucho más la atención que no exista alguna placa o monumento en el que se explique quién fue Felisa Munárriz (soprano nacida en Pamplona en 1892 que desarrolló su carrera en Italia). Además, nos comentan que se podrían incluir elementos decorativos alusivos a la música o la ópera. El dotar de una identidad a la plaza es fundamental para que sea un lugar atractivo y proporcione una experiencia enriquecedora.
Felisa Munárriz. Fuente: www.todocoleccion.net
Llama la atención la presencia de muy pocos árboles en relación con las grandes dimensiones de la plaza. En general, hay muy pocas zonas verdes en el resto de plazas del barrio.
Urbanas destacan que hay muchas formas de incluir la naturaleza en las plazas, que como ésta, están situadas encima de un garaje: muros o esculturas vegetales, maceteros con flores o maceteros con árboles de menor porte que darían algo de resguardo y sombra sobre todo a la zona de juegos de niños.
Plaza Felisa Munárriz. Foto: contemporary bites
Se señala como punto positivo la presencia de una zona de bancos cubierta por una gran pérgola. Es un buen lugar para estar al resguardo de la lluvia o a la sombra en verano.
Sin embargo, los bancos no tienen apoyabrazos, lo que dificulta que las personas mayores o enfermas se puedan ayudar para sentarse o levantarse.
Plaza Felisa Munárriz. Foto: contemporary bites
Nos cuentan que la eficiencia energética en los edificios es una de sus preocupaciones. Nos señalan las grandes chimeneas que aparecen en una esquina de la plaza y que pertenecen a un sistema de calefacción comunitaria que da servicio a 700 viviendas del barrio. También nos explican que en este barrio hay varios ejemplos de calefacciones comunitarias que se colocaron en los años 70. Son un ejemplo de eficiencia energética ya que tienen un mayor rendimiento que las calefacciones individuales y también tienen un mayor mantenimiento lo que las hace más seguras. Nos hablaron de que la pobreza energética tiene nombre de mujer, al haber muchas más mujeres viudas que viudos y con pensiones muy inferiores a las de los varones (una parte importante de la población del barrio son personas mayores).
Plaza Felisa Munárriz. Foto: contemporary bites
OTRAS REFLEXIONES IMPORTANTES DEL PASEO
Nos explicaron que el barrio se conformó en los años 50 a partir de la emigración que se produjo del campo a la ciudad. Y en la actualidad ha recibido mucha población inmigrante. También es un barrio con muchas personas jóvenes que son estudiantes de las universidades situadas próximas al barrio.
Un punto muy positivo en el urbanismo del barrio es la escultura que rinde homenaje a la diversidad de personas y orígenes que forman parte del barrio.
Escultura homenaje a la diversidad de los habitantes del barrio. Foto: Belén Pomés
En los años 50 y 60 se construyó rápidamente, y al no existir normativas en ese momento, se produjo de una forma caótica. Además la mayoría de edificios que se construyeron fueron viviendas sociales por lo que nos encontramos que en la actualidad más de la mitad de los edificios de viviendas del barrio no tienen ascensor. Y si sumamos que el barrio tiene una orografía complicada con fuertes desniveles entre distintas zonas, esto ha llevado a la población de mayor edad a irse del barrio. Por lo que la instalación de ascensores y las rehabilitaciones en las viviendas se hacen todavía más complicadas porque muchas viviendas son de alquiler y no interesa ese desembolso de dinero a los propietarios.
Se señalan como puntos positivos de la rehabilitación de viviendas del barrio el que se pueda invadir la acera o una plaza de aparcamiento para la instalación de ascensor en los edificios. También indican la posibilidad de colocar rampas para dar acceso a las viviendas de planta baja y otras plantas en el caso de que no se pueda instalar ascensor en las viviendas.
Foto: Belén Pomés
Para salvar los desniveles en las calles con más pendiente del barrio se han instalado algunos ascensores pero los vecinos se quejan de que se suelen averiar. Y que las calles para acceder a esos ascensores tienen pendientes bastante fuertes por lo que hace complicado la movilidad de personas mayores o discapacitados. Como ocurre en el acceso a los ascensores situados al final de la calle Isaac Albéniz.
Calle Isaac Albéniz. Foto: Belén Pomés
La calle Isaac Albéniz (la "Carlos III de la Milagrosa" según la denominan las vecinas y vecinas del barrio) a simple vista parece una calle peatonal preciosa que invita a la estancia bajo la sombra de sus árboles. Sin embargo, tiene un gran problema que pudimos experimentar durante el paseo: constantemente circulan coches por ella, ya que la calle está llena de garajes en planta baja, lo que supone un gran peligro.
Los vecinos reclaman un centro de cultura en el barrio y desde Urbanas se señala la posibilidad de convertir el antiguo Cine Guelbenzu en centro para la comunidad.
Los participantes del paseo caminando frente al antiguo Cine Guelbenzu. Foto: Belén Pomés
Como véis el Colectivo Urbanas está haciendo un gran trabajo al escuchar a tantas vecinas y vecinos de la Milagrosa que han colaborado para realizar el análisis del urbanismo de este barrio. Y sobre todo, al animar a tanta gente a participar de este "Paseo de Jane" que nos ha abierto los ojos para mirar de una forma diferente a nuestras plazas y calles para fomentar un diseño urbanístico que no se olvide de las personas y escuche a los habitantes de los barrios.
Para terminar, además me gustaría expresar un deseo propio: ¡más diseño biofílico en las ciudades!. Y no me refiero solo a construir más parques, sino a introducir la naturaleza en las plazas, porque las personas que viven en las ciudades la echan mucho de menos. No olvidemos que la biofilia es un sentimiento innato en los seres humanos que explica la necesidad humana de estar cerca de la naturaleza y que el estar cerca de ella, proporciona felicidad y bienestar.
Dos de las integrantes del colectivo Urbanas (con sus paraguas violetas) y varios participantes del paseo escuchando a una vecina de la plaza Santa Cecilia relatando orgullosa cómo su marido había contribuido a que se plantaran muchos de los árboles del barrio. Foto: Ana Blanco
Plaza de Santa Cecilia. Al fondo aparece el grupo de personas que participaron en el paseo. Foto: Belén Pomés
EL COLECTIVO URBANAS (formado por arquitectas, urbanistas, biólogas, economistas, sociólogas y psicólogas) se creó en 1999 en Navarra para fomentar la participación de las mujeres en el planeamiento urbanístico, vivienda y medioambiente y para incorporar la perspectiva de género en esos campos.
¿Pero qué es un urbanismo con perspectiva de género?. Tal y como ellas lo entienden es un urbanismo de sentido común, un urbanismo pensando en las personas que van a habitar esos espacios y teniendo en cuenta su opinión y necesidades. Ponen el foco en las mujeres pero sin olvidar otros grupos también invisibilizados como ancianos, niños, enfermos, discapacitados, inmigrantes, etc. En resumen, un urbanismo para todas las personas, centrado en la igualdad de género, la accesibilidad y la sostenibilidad.
Y para fomentar este tipo de diseño urbanístico, el pasado 5 de Mayo se realizó El PRIMER PASEO DE JANE en Pamplona (Jane´s Walk en inglés) por el barrio de la Milagrosa y guiado por el Colectivo Urbanas, conmemorando el cumpleaños de Jane Jacobs. Este paseo formó parte de una red de miles de "Paseos de Jane" que tuvieron lugar en más de 200 ciudades de todo el mundo para difundir el espíritu de Jane en su lucha por defender un urbanismo amable con las personas, frente a intereses inmobiliarios y automovilísticos.
Grupo de personas que participaron en el primer paseo de Jane en Pamplona junto al colectivo Urbanas encargadas de guiar el paseo. Foto: Colectivo Urbanas
Jane Jacobs, periodista estadounidense, fue pionera en los años 60 y 70 al hablar de que las calles en las que no había comercios eran inseguras para las mujeres (al no haber alguien vigilando); que los nuevos barrios de las afueras formados únicamente por viviendas sociales eran un fracaso porque se convertían en guetos o que las plazas y espacios abiertos eran fundamentales para la vida del vecindario. Luchó para que las personas y las aceras fueran las protagonistas de los barrios frente a los coches y carreteras, consiguiendo paralizar varias intervenciones urbanísticas sobre todo en la ciudad de Nueva York.
Durante el paseo por el barrio de la Milagrosa de Pamplona fuimos observando y escuchando atentamente a las explicaciones de Urbanas para comprobar si su diseño urbanístico realmente estaba pensado para las personas que lo utilizaban y si propiciaba la vida en sus calles.
A la izquierda de la foto, una integrante del colectivo Urbanas durante una de las explicaciones del paseo. Foto: Ana Blanco
Como ejemplo de lo que fueron las explicaciones durante el paseo, os expongo en detalle la que tuvo lugar en la plaza Felisa Munárriz, una plaza de grandes dimensiones que fue creada junto a los nuevos edificios de viviendas que la rodean hace aproximadamente una década.
PLAZA FELISA MUNÁRRIZ
¿Quién es Felisa Munárriz?. Ninguna de las personas que asistimos al paseo supimos responder, y es que muy poca gente en Pamplona sabe quién fue. Por eso, llama mucho más la atención que no exista alguna placa o monumento en el que se explique quién fue Felisa Munárriz (soprano nacida en Pamplona en 1892 que desarrolló su carrera en Italia). Además, nos comentan que se podrían incluir elementos decorativos alusivos a la música o la ópera. El dotar de una identidad a la plaza es fundamental para que sea un lugar atractivo y proporcione una experiencia enriquecedora.
Felisa Munárriz. Fuente: www.todocoleccion.net
Llama la atención la presencia de muy pocos árboles en relación con las grandes dimensiones de la plaza. En general, hay muy pocas zonas verdes en el resto de plazas del barrio.
Urbanas destacan que hay muchas formas de incluir la naturaleza en las plazas, que como ésta, están situadas encima de un garaje: muros o esculturas vegetales, maceteros con flores o maceteros con árboles de menor porte que darían algo de resguardo y sombra sobre todo a la zona de juegos de niños.
Plaza Felisa Munárriz. Foto: contemporary bites
Se señala como punto positivo la presencia de una zona de bancos cubierta por una gran pérgola. Es un buen lugar para estar al resguardo de la lluvia o a la sombra en verano.
Sin embargo, los bancos no tienen apoyabrazos, lo que dificulta que las personas mayores o enfermas se puedan ayudar para sentarse o levantarse.
Plaza Felisa Munárriz. Foto: contemporary bites
Nos cuentan que la eficiencia energética en los edificios es una de sus preocupaciones. Nos señalan las grandes chimeneas que aparecen en una esquina de la plaza y que pertenecen a un sistema de calefacción comunitaria que da servicio a 700 viviendas del barrio. También nos explican que en este barrio hay varios ejemplos de calefacciones comunitarias que se colocaron en los años 70. Son un ejemplo de eficiencia energética ya que tienen un mayor rendimiento que las calefacciones individuales y también tienen un mayor mantenimiento lo que las hace más seguras. Nos hablaron de que la pobreza energética tiene nombre de mujer, al haber muchas más mujeres viudas que viudos y con pensiones muy inferiores a las de los varones (una parte importante de la población del barrio son personas mayores).
Plaza Felisa Munárriz. Foto: contemporary bites
OTRAS REFLEXIONES IMPORTANTES DEL PASEO
Nos explicaron que el barrio se conformó en los años 50 a partir de la emigración que se produjo del campo a la ciudad. Y en la actualidad ha recibido mucha población inmigrante. También es un barrio con muchas personas jóvenes que son estudiantes de las universidades situadas próximas al barrio.
Un punto muy positivo en el urbanismo del barrio es la escultura que rinde homenaje a la diversidad de personas y orígenes que forman parte del barrio.
Escultura homenaje a la diversidad de los habitantes del barrio. Foto: Belén Pomés
En los años 50 y 60 se construyó rápidamente, y al no existir normativas en ese momento, se produjo de una forma caótica. Además la mayoría de edificios que se construyeron fueron viviendas sociales por lo que nos encontramos que en la actualidad más de la mitad de los edificios de viviendas del barrio no tienen ascensor. Y si sumamos que el barrio tiene una orografía complicada con fuertes desniveles entre distintas zonas, esto ha llevado a la población de mayor edad a irse del barrio. Por lo que la instalación de ascensores y las rehabilitaciones en las viviendas se hacen todavía más complicadas porque muchas viviendas son de alquiler y no interesa ese desembolso de dinero a los propietarios.
Se señalan como puntos positivos de la rehabilitación de viviendas del barrio el que se pueda invadir la acera o una plaza de aparcamiento para la instalación de ascensor en los edificios. También indican la posibilidad de colocar rampas para dar acceso a las viviendas de planta baja y otras plantas en el caso de que no se pueda instalar ascensor en las viviendas.
Foto: Belén Pomés
Para salvar los desniveles en las calles con más pendiente del barrio se han instalado algunos ascensores pero los vecinos se quejan de que se suelen averiar. Y que las calles para acceder a esos ascensores tienen pendientes bastante fuertes por lo que hace complicado la movilidad de personas mayores o discapacitados. Como ocurre en el acceso a los ascensores situados al final de la calle Isaac Albéniz.
Calle Isaac Albéniz. Foto: Belén Pomés
La calle Isaac Albéniz (la "Carlos III de la Milagrosa" según la denominan las vecinas y vecinas del barrio) a simple vista parece una calle peatonal preciosa que invita a la estancia bajo la sombra de sus árboles. Sin embargo, tiene un gran problema que pudimos experimentar durante el paseo: constantemente circulan coches por ella, ya que la calle está llena de garajes en planta baja, lo que supone un gran peligro.
Los vecinos reclaman un centro de cultura en el barrio y desde Urbanas se señala la posibilidad de convertir el antiguo Cine Guelbenzu en centro para la comunidad.
Los participantes del paseo caminando frente al antiguo Cine Guelbenzu. Foto: Belén Pomés
Como véis el Colectivo Urbanas está haciendo un gran trabajo al escuchar a tantas vecinas y vecinos de la Milagrosa que han colaborado para realizar el análisis del urbanismo de este barrio. Y sobre todo, al animar a tanta gente a participar de este "Paseo de Jane" que nos ha abierto los ojos para mirar de una forma diferente a nuestras plazas y calles para fomentar un diseño urbanístico que no se olvide de las personas y escuche a los habitantes de los barrios.
Para terminar, además me gustaría expresar un deseo propio: ¡más diseño biofílico en las ciudades!. Y no me refiero solo a construir más parques, sino a introducir la naturaleza en las plazas, porque las personas que viven en las ciudades la echan mucho de menos. No olvidemos que la biofilia es un sentimiento innato en los seres humanos que explica la necesidad humana de estar cerca de la naturaleza y que el estar cerca de ella, proporciona felicidad y bienestar.
Dos de las integrantes del colectivo Urbanas (con sus paraguas violetas) y varios participantes del paseo escuchando a una vecina de la plaza Santa Cecilia relatando orgullosa cómo su marido había contribuido a que se plantaran muchos de los árboles del barrio. Foto: Ana Blanco
Plaza de Santa Cecilia. Al fondo aparece el grupo de personas que participaron en el paseo. Foto: Belén Pomés
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